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| Laurent Fignon, genio y figura. |
Se disputaba el Tour de Francia de 2010. Andy Schleck iba líder y lanza un ataque, a su rueda intenta seguirle Alberto Contador, cuando esta cerca de cogerle a Andy se le sale la cadena y Contador continúa pa´lante. En ese momento la carrera ha estallado y se arma zafarrancho de combate, nadie mira atrás. El luxemburgués ha perdido unos segundos valiosos solucionando su avería y se ha quedado cortado. Muchos empiezan a hablar de polémica. Tras la etapa la cosa va en aumento y Contador es abucheado en el pódium. Horas más tarde pide perdón públicamente a través de un vídeo. Nadie parece recordar (a mí ya me falla la memoria, si no estoy en lo cierto que alguien me corrija) que a comienzos de la ronda, el Saxo Bank retuvo al pelotón para esperar a Schleck que estaba circulando con retraso por una caída. Ni que nadie hiciese lo propio cuando Contador sufrió una caída cerca de meta en un tramo con pavés. Carlos Sastre fue de los que hablo del doble rasero de medida de algunos, cuando afirmaba que cuando él se caía nadie le esperaba. Y es que una cosa es el fair play y la deportividad y otras las gilipolleces. Semanas más tarde se empezaría a hablar de clembuterol, chuletas y demás, y este tema apenas volvería a ser debatido, pero en su día originó bastante controversia la acción de Contador.
Pedro Delgado
preguntó al irlandés Sean Kelly durante
ese Tour que hubiera hecho él. Kelly, creo recordar, le dijo que él no hubiera
atacado directamente, simplemente hubiera estado atento al desarrollo de la
carrera. Perico le preguntó ¿qué crees que hubiera hecho Fignon? Kelly, buen amigo
del parisino, simplemente soltó una carcajada cómplice. Y es que Laurent Fignon
no era de los que perdonaba una debilidad en sus adversarios, ni pedía permiso para
atacar.
Tanto Kelly, como Fignon y Delgado ocuparon lugares
destacados en las carreteras de los ochenta y los tres se volvían a encontrar
en Julio por Francia como comentaristas de diferentes televisiones. El Tour del
201 fue el último de Fignon, enfermo de cáncer moría hace justo tres años, el
31 de agosto de 2010, fecha de defunción que comparte con alguna otra “celebridad”
.
Como decía Ángel Arroyo, uno de sus rivales (segundo tras Laurent en el
Tour del 83), al enemigo había que matal-lo.
Este corredor abulense, apodado El Salvaje, en una reciente entrevista,
publicada en inglés en la revista Rouleur (nº35, diciembre 2012) habla más de
una vez de that fucker Fignon,
expresión que puede tener un sentido más fuerte que el título de esta entrada.
Y es que Laurent no dejaba indiferente a nadie, a pesar de su look de empollón, que le valió el apodo de El Profesor, nunca tuvo pelos en la lengua.
Dotado de una clase excepcional irrumpió con una juventud
fulgurante ganando dos Tour (83 y 84), sin olvidar el Giro 84, que le fue
robado de forma vergonzosa por la organización en beneficio del local Francesco
Moser.
Luego vendría una
dura lesión que casi le hace colgar y que le devolvió al terreno de los
mortales, pero de la que pudo salir para seguir dando lecciones de calidad.
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| Un libro sin desperdicio |
Pero también dio mucho que hablar fuera de la carretera,
especialmente en sus primeros años, donde se le subieron los humos, a público, periodistas y ciclistas. El propio
Fignon lo reconocía en su esplendida autobiografía, con un título que lo dice
todo: “Éramos jóvenes e insconscientes”,
publicada en castellano por Cultura Ciclista, toda una aventura editorial de la
mano de Bernat López, quien se he empeñado en que los hispanoparlantes pueden
disfrutar de los mejores libros internacionales sobre la bicicleta y su mundo.
Esa obra es obligatoria para todo aquel que disfrute del
ciclismo y sepa leer. Políticamente incorrecta, poéticamente hipnótica y
fascinante, a través de sus páginas Fignon no sólo habla del ciclismo agonístico si no de
la vida en general, de sus defectos y de sus virtudes, aunque echo en falta que
hable de ciertos aspectos y personas, pero bueno, el libro es, sencillamente, inconmensurable.
Directo, pasional y sincero, a la vez que bello.
De crío llegue a odiar a Fignon, por todo lo relacionado con
la última crono del Tour 89 y la manipulación mediática y social sufrida en
este país por muchas cosas venidas desde el otro lado de los Pirineos. Durante
los primeros años del reinado de Indurain, cuando Fignon estaba en decadencia,
quemado de muchas cosas y a punto de retirarse comencé a respetarle y con el
tiempo he llegado a admirarle. Y es que
Fignon siempre fue un rara avis
dentro del pelotón. Y sino que cada uno
lea sus ideas y experiencias y saque conclusiones.
Todo el mundo le recuerda por su derrota en el Tour del 89,
pero bueno, o es mi caso. En primer lugar porque ese Tour debió ser de Perico
Delgado, lastima de su despiste en la prologo de Luxemburgo y de su fatal
inicio…aunque la remontada que realizo es digna de elogio, a mi juicio más llamativa
que la derrota de Fignon. Aunque hay que reconocer que fue todo un shock para
el francés sufrir esa derrota cuando,
después de muchos años, se había encontrado con un golpe de pedal similar a sus
años gloriosos.
El jodido Fignon… siempre dispuesto a atacar en el momento
menos esperado. Era el Tour de 1987,
Fignon ya no contaba para la General, no estaba teniendo un gran Tour y veía como Francia se volcaba con el joven Jean
François Bernard, miembro de un equipo con el que Fignon tenía muchas
diferencias. Seguro que Fignon empezaba a estar cabreado y con ganas de jugar
un poco. La etapa de La Plagne tenía el mismo recorrido que la que ganó en
1984. En esa etapa Stephen Roche se había escapado con otros corredores en un
avituallamiento (¿por qué nadie ataca en ellos?) y había puesto en apuros a
Perico, entonces líder de la carrera. Tras ser neutralizados surge un momento
de calma y Fignon ataca con decisión desde atrás, pillando a todo el mundo por
sorpresa (ver el primer video, en 4:35), salvo a un avispado Anselmo Fuerte,
que va tras él y Gert- Jan Theunisse que hace el amago pero prefiere quedarse junto a su
jefe Delgado.
Mientras Perico estuvo a punto de sentenciar el Tour a su
favor, pero no pudo ser (al final Roche se recompuso y sólo perdió tres
segundos con el segoviano) Fignon y Fuerte echaban un mano a mano en el puerto
de La Plagne, ganando el del Systeme U al sprint. Ese día seguro que llego al
hotel contento con la que había liado, después de tres años sin ganar en el
Tour, sobre todo al enterarse de que Bernard había perdido una minutada que le
dejaba, de momento, fuera del pódium y por detrás de Mottet, compañero de Fignon.
Este vídeo se centra en la lucha entre Roche y Delgado, pero el ataque de Fignon (4:35) es fiel a su manual de estilo, sin dudarlo y a traición, por sorpresa.
Existe un vídeo de la última ascensión completa, no me deja cargarlo, subido por Wenck, se trata de la emisión en directo de RTVE, lógicamente en castellano: Tour de France 1987 - Stage 21 (La Plagne) - Laurent Fignon
El jodido
Fignon… Gone, but not forgotten!!!
CCC
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